@MagdaRevetllat
De repente una gran cantidad de personas han desaparecido del planeta: de cualquier país, de cualquier condición social, de cualquier religión, de cualquier etnia... Personas que estaban en su actividad habitual, solos o rodeados de otras personas, de pronto han desaparecido y a consecuencia de ello han ocurrido accidentes por todo el planeta, coches y trenes se han quedado sin conductor y algún copiloto de líneas aéreas ha tenido que hacer algún aterrizaje de emergencia.
Unos lo atribuyen a un acto divino: Dios se ha llevado a los suyos, aunque después no quede tan claro si a quienes se ha llevado son los que a Dios le gustaría tener a su lado. De todas maneras, familias y amigos han perdido a sus seres queridos, equipos deportivos se han quedado sin alguna de sus figuras y algún país sin su primer representante.
Pero la vida debe continuar para los que han quedado, así que algunos recuperan su vida con mayor o menor normalidad mientras otros se unen a alguna de las nuevas sectas como El Residuo Culpable, cuyos miembros visten de blanco, fuman a todas horas, no pronuncian palabra y persiguen inquisitivamente a sus conciudadanos para recordarles que la Hora Final ha llegado. O los Descalzos, que viven en continua fiesta, no usan calzado, se lavan poco y muestran una diana pintada en la frente.
Continuar con la vida cotidiana, dejarlo todo y abrazar una secta, empezar desde cero una nueva vida... Una opción para cada persona, de las que han quedado, claro. Las demás, ¿quién sabe dónde están?
Conmocionante.
De repente una gran cantidad de personas han desaparecido del planeta: de cualquier país, de cualquier condición social, de cualquier religión, de cualquier etnia... Personas que estaban en su actividad habitual, solos o rodeados de otras personas, de pronto han desaparecido y a consecuencia de ello han ocurrido accidentes por todo el planeta, coches y trenes se han quedado sin conductor y algún copiloto de líneas aéreas ha tenido que hacer algún aterrizaje de emergencia.
Unos lo atribuyen a un acto divino: Dios se ha llevado a los suyos, aunque después no quede tan claro si a quienes se ha llevado son los que a Dios le gustaría tener a su lado. De todas maneras, familias y amigos han perdido a sus seres queridos, equipos deportivos se han quedado sin alguna de sus figuras y algún país sin su primer representante.
Pero la vida debe continuar para los que han quedado, así que algunos recuperan su vida con mayor o menor normalidad mientras otros se unen a alguna de las nuevas sectas como El Residuo Culpable, cuyos miembros visten de blanco, fuman a todas horas, no pronuncian palabra y persiguen inquisitivamente a sus conciudadanos para recordarles que la Hora Final ha llegado. O los Descalzos, que viven en continua fiesta, no usan calzado, se lavan poco y muestran una diana pintada en la frente.
Continuar con la vida cotidiana, dejarlo todo y abrazar una secta, empezar desde cero una nueva vida... Una opción para cada persona, de las que han quedado, claro. Las demás, ¿quién sabe dónde están?
Conmocionante.
